Salta al contenido principal
Página

TEMA 3.1: APRENDIZAJE A PARTIR DE LA RESOLUCIÓN DE PROBLEMÁTICAS COMUNITARIAS


La capacidad de juntar la comunidad y la escuela e incorporar los elementos de una comunidad, las personas y ambiente, en el desarrollo de los estudiantes tiene como fin formar sujetos capaces de resolver problemáticas sociales y ambientales dentro de sus comunidades.

Los procesos educativos que tienen como punto de referencia a la comunidad, tal como el modelo ChanGo, centran sus propósitos en el desarrollo de todos los grupos sociales que conforman un colectivo. De este modo, no se trata de procesos individualistas orientados únicamente a la mejora personal, sino que la educación cobra sentido cuando se lleva a cabo en dinámicas compartidas donde todos tienen algo para enseñar y aprender.

Desde este enfoque, la educación tiene como propósito dar respuesta a las demandas sociales (Cieza, 2006), las cuales parten de requerimientos individuales, pero en relación con las necesidades de los otros. En consecuencia, las personas se forman en un contexto dentro del cual el bienestar individual es importante en tanto que impacta en el bienestar de los demás.  

Este tipo de aprendizaje hace referencia al contexto sociocultural como elemento clave para la adquisición de habilidades y competencias, buscando la solución de los retos diarios siempre con una visión colectiva.

El aprendizaje situado trata de incentivar el trabajo en equipo y cooperativo a través de proyectos orientados a problemas que precisen de la aplicación de métodos analíticos que tengan en cuenta todo tipo de relaciones y vinculaciones.

A modo de síntesis, las principales características y parámetros de funcionamiento del aprendizaje situado serían:

  • Aprender es una experiencia social que se enriquece con experiencias de otros, con recursos compartidos y con prácticas sociales comunes.
  • Parte de la idea central de que el conocimiento es contextual y, por lo tanto, está fuertemente influenciado por la actividad, los agentes, los elementos del entorno y la cultura donde tiene lugar.
  • Según esta visión de la educación y el aprendizaje, la enseñanza se debe centrar en prácticas educativas auténticas. Estando dicha autenticidad determinada por: el grado de relevancia cultural de las actividades sociales, las prácticas compartidas en las que participe el estudiante, así como del tipo y nivel de actividad social promovidas por estas.
  • A través de los procesos culturales los alumnos se apropian de las herramientas de aprendizaje, adquiriendo y ampliando sus propias habilidades, al tiempo que desarrollan una estructura mental particular  y una inteligencia individual.
  • La participación de los adultos (maestros, familias) es actuar de guía para que los alumnos estructuren y modelen las soluciones más adecuadas.

Por encima de cualquier otra consideración, el aprendizaje situado trata de reflejar la importancia que está adquiriendo actualmente la dimensión social en la construcción del conocimiento, así como el valor de los saberes significativos.